viernes, 30 de abril de 2021

Siempre el evangelio es buena noticia para nosotros porque nos encontraremos con Jesús la verdadera sabiduría y el verdadero camino de una vida en plenitud

 


Siempre el evangelio es buena noticia para nosotros porque nos encontraremos con Jesús la verdadera sabiduría y el verdadero camino de una vida en plenitud

Hechos de los apóstoles 13, 26-33; Sal 2; Juan 14, 1-6

Un camino es como una puerta abierta que siempre nos lleva a algo, a alguna parte, a algún lugar. Siento curiosidad por los caminos; vivo en un isla con sus correspondientes limitaciones de espacio pero siempre en nuestras andanzas nos podemos encontrar con un nuevo camino, un camino que desconocíamos y sentimos la curiosidad por saber a donde nos lleva, por descubrir lo que se ve más allá; atrevido me he metido por muchos caminos en mi isla queriendo descubrir lugares, descubrir paisajes, ver nuevas conexiones con otros lugares. Es una curiosidad que llevamos dentro, pero que puede ser que no se quede solo en descubrir caminos topográficos sino que puede ser imagen de algo más.

También decimos que se abre un camino en nuestra vida cuando nos ofrecen un pensamiento que nos hace detenernos para descubrir otros horizontes, otros planteamientos; también se abre un camino en nuestra vida cuando en un determinado momento profundizamos en algo que quizá ya de alguna manera conocíamos pero que ahora lo vemos con una nueva perspectiva, con otra amplitud, o que nos hace meternos más en el misterio de Dios para descubrir lo que el Señor nos ofrece para la vida.

Creo que ésta tendría que ser la sed con que nosotros nos acercamos al evangelio, sedientos de algo más, sedientos de un sabor nuevo, sedientos de una hondura que muchas veces en nuestras carreras y en nuestra superficialidad no le damos. Cuidado pasemos por el evangelio, como se suele decir, como perro por viña vendimiada, donde piensa que ya no va a encontrar nada nuevo, nada que nos pueda dar un nuevo impulso a la vida.

Por esa imagen de la viña vendimiada que me ha venido a la mente, recuerdo que de chico rebuscábamos en las viñas ya vendimiadas y siempre encontrábamos un nuevo racimo, muchas veces más hermoso y que cuando lo comíamos parecía que hasta sabía mejor. Así en esa búsqueda tenemos que acercarnos siempre al evangelio, porque la riqueza de la palabra de Dios es muy grande y siempre habrá un sabor nuevo que podemos encontrar para darle a nuestra vida.

Nunca podemos decir ante una página del evangelio eso ya me lo sé, ya lo conozco. Siempre es evangelio para nosotros y no olvidemos que evangelio significa buena noticia, y las noticias son siempre cosas nuevas. Así con esa apertura del corazón tenemos que acercarnos a la Palabra de Dios.

Las palabras que hoy escuchamos forman parte del discurso de la última cena de Jesús donde en primer lugar quiere alentar su esperanza. ‘Hay muchas estancias, me voy a prepararos sitio, os llevaré conmigo para que donde yo esté, estéis también vosotros’. Y surge la pregunta en los discípulos de cómo ir al Padre, que es la meta que Jesús les propone, nos propone. ‘A donde yo voy ya sabéis el camino’, les dice Jesús. Y como los discípulos no acaban de entender termina afirmando ‘yo soy el Camino, y la Verdad, y la Vida, nadie va al Padre sino por mí’.

Jesús el camino que nos lleva al Padre. Hablábamos al principio de caminos en muchos sentidos. Ahora nos encontramos con el camino de verdad y que no es otro que Jesús mismo. Es el camino que de verdad tenemos que buscar, es el camino que tenemos que hacer, es el camino que se convierte en el sentido de nuestra vida, es el camino que nos lleva siempre a la plenitud. Por eso al mismo tiempo nos dice que es la Verdad y que es la Vida. No hay otra luz ni otra sabiduría.

No hay ninguna otra cosa que nos lleve la Vida en plenitud, cómo tenemos que preocuparnos de conocer a Jesús, de empaparnos de su evangelio, de dejarnos inundar por su vida. En nuestro camino pascual que vamos realizando es en eso en lo que tenemos que profundizar y hacer vida en nosotros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario